Sicilia, un viaje en autocaravana
Sicilia en autocaravana: La mayoría de las islas tienen algo que las hace muy especiales. Pero si hubiera que decantarse por una de las que reúne más atractivos en sus 25.000 kilómetros cuadrados, Sicilia sería la opción perfecta.
No solo porque en ella se combinan paisajes extraordinarios tanto de playa como de montaña, sino también porque cuenta con un patrimonio histórico espectacular que cuenta cómo fue allí la vida durante siglos.
Y además, los autocaravanistas encontrarán los servicios indispensables para poder recorrerla cómodamente en su vehículo, disfrutando del placer de poder improvisar a cada momento.
Algo que seguramente querrán hacer porque algunos de los rincones de esta isla atrapan de tal forma al viajero que invitan a alargar la estancia.
Taormina
Una vez cruzado en ferry el estrecho de Messina, nos adentraremos en la ciudad de Taormina, donde nos espera una de las grandes sorpresas del viaje: el teatro helenístico donde los romanos desarrollaban los espectáculos de lucha frente al mar Mediterráneo y la humeante cima del Etna.
No es el único atractivo de esta ciudad costera que impresionó tanto a Goethe. Un paseo por sus calles nos descubrirá el Palacio Corvaia, las iglesias de San Pancracio y Santa Catalina de Alejandría, la cavea del antiguo Odeón, la Plaza IX de abril o el barrio medieval de Taormina entre otros tesoros.
Giardini di Naxos
Y si tenemos tiempo, muy cerca, a solo unos kilómetros podemos continuar nuestra ruta por Sicilia en autocaravana. Encontraremos Giardini di Naxos, otro lugar muy recomendable que se encuentra entre los predilectos de los sicilianos.
Después seguiremos rumbo al Etna, donde podemos alcanzar su cima si nos vemos con fuerzas y el tiempo acompaña en una excursión con guía, y aprovechar además para conocer después los pueblos que se levantan en su falda.
Catania
Tocará entonces descansar, y podemos hacerlo, además con vistas al mar, en el camping Jonio, ya al lado de Catania, el siguiente punto de nuestra ruta.
Segunda ciudad en importancia de Sicilia, es muy conocida por su particular arquitectura barroca, y de hecho el centro de la ciudad es Patrimonio de la Humanidad.
Cuentan que fue totalmente reconstruida tras el gran terremoto de 1693, como la mayoría del este de la isla, y por eso todo su patrimonio es posterior a esa época.
Siracusa
Seguiremos después camino de Siracusa, con uno de los patrimonios arqueológicos más ricos de la isla.
No podemos perdernos el parque arqueológico de Neapolis, en la parte alta, con el anfiteatro romano, la latomía y el teatro griego.
Este último es de los más grandes del mundo, y dicen que aquí dio Platón un discurso sobre su idea de República.
Tampoco podemos perdernos la sede original de la ciudad, Ortigia. Ni la famosa Oreja de Dionisio o la gruta Dei Cordari.
Noto
Para completar la excursión podemos acercarnos a Noto, una preciosa localidad considerada la joya del barroco siciliano.
Justo allí se encuentra un área para autocaravanas a la que podemos acercarnos para descansar antes de seguir la ruta.
Agrigento
Aún nos queda conocer Agrigento, ya en la parte oeste de Sicilia, donde se encuentra el conjunto de templos griegos mejor conservado del mundo.
Selinunte
O Selinunte, otro de los enclaves arqueológicos más destacados del Mediterráneo además de ser el yacimiento griego más extenso.
Y el monte San Giuliano sobre el que se levanta Erice, con preciosas calles empedradas que nos trasladan varios siglos atrás. Desde lo alto de Erice, si el tiempo lo permite, podremos divisar Túnez o el Etna, una panorámica que es un auténtico espectáculo por el que merece la pena llegar hasta aquí.
Palermo
Para terminar la ruta todavía nos queda un imprescindible más: Palermo, la capital de esta isla llena de rincones mágicos.
Para descubrir la verdadera personalidad de la localidad, en la que han dejado su huella las distintas civilizaciones, hay que recorrerla sin prisa, paseando y perdiéndose por sus calles, en las que abundan tesoros que van desde la mezquita árabe-normanda de San Giovanni degli Eremiti a la capilla palatina del Palacio Normando, la catedral, la plaza de Quattro Canti…
Todo un museo abierto para el viajero. Cerca de esta ciudad podremos descansar en el camping La playa que, como su propio nombre indica, está en plena playa.
Un buen cierre para una ruta de las que querrás repetir.