La imaginación también cuenta
Comienza la primavera y poco a poco se van despertando las ganas de coger nuestra autocaravana y hacer camino. El camino, es Delibes. Delibes es Valladolid y por supuesto, Castilla y León. Aquí todo va más despacio y la primavera espera a que se vayan los fríos. En Castilla y León, las carreteras y los paisajes se empiezan a vestir de colores primaverales. Primero, el campo se tiñe de malva, luego vienen los amarillos y por último los rojos de las amapolas. Parece cursi, pero merece la pena. Entre tanto festín de colores y pueblos encantadores donde darse un homenaje con la rica gastronomía castellana, también empiezan a abrir sus puertas los parques de aventuras como el Parque temático del Valle de los Seis Sentidos, en Valladolid.
Un plan para llevar a los niños y que, como valor añadido tiene el acceso para niños con necesidades especiales y juegos específicos para ellos.
El Valle de los Seis Sentidos presume de ser el más completo de toda Europa. 18.000 metros cuadrados llenos de diversión. Más de 60 juegos diferentes para pasar el día… de seguro que no queda tiempo para el aburrimiento. El Valle está en la finca del viejo Palacio de los Power en el Valle de Esgueva.
Para empezar y hacernos una idea organizada de la jornada, vemos que el parque está dividido en varias zonas:
El Jardín de Piedras, El Palacio de los Sentidos, El Valle de los Valientes, Las Colinas del Laberinto, El Merendero del Dique, El Busque Rascanubes, La Granja…
Primavera en autocaravana
Todos cuentan con el certificado europeo de seguridad TUV, es decir, son seguros para que los niños estén jugando y los padres tranquilos. Os preguntaréis por qué se llama de los Seis Sentidos cuando los sentidos son cinco. Pues está claro… El sexto es la imaginación que se despierta al ver tantos juegos que invitan a los niños a experimentar.
Coger, mover y cambiar son verbos que aquí todavía funcionan. Los juegos además son todos rústicos, analógicos. Los hay de descubrir, experimentar, correr, trepar, saltar, jugar al ajedrez gigante. También los hay para desarrollar los sentidos. El oído, el equilibrio, el tacto, el olfato y aunque es un parque pensado para niños, los adultos lo pasan igual de bien.
Dentro de las ruinas del Palacio de los Power está la parte científica donde descubrir secretos sobre el movimiento, la transmisión del sonido y efectos visuales. Y… ¿A qué niño no le gustan las piedras? En el Valle han creado una zona dedicada a todas las piedras originarias de la Comunidad. Se pueden ver todos los tipos de piedras, mover rocas de toneladas con una sola mano, los efectos sonoros que crean se sienten.
De aquí pasamos al Bosque, un bosque de postes para trepar unidos por puentes, cuerdas y escalas. Luego podemos pasar a los Juegos de Agua. Canales, presas, estanques, fuentes, balsas se convierten en un sitio perfecto para refugiarse en los días de solana castellana del verano.
Además, en la entrada al parque hay un anfiteatro cubierto con una carpa donde está la venta de entradas, los baños y una zona de descanso, a la sombra y con máquinas de bebidas. Los precios son para todos los públicos, no pasan de los 4 euros.
Una excursión divertida y que de seguro hará dormir como lirones a los peques. Para descansar tenemos la opción del Área para autocaravanas de Valladolid (Av. Ramón Pradera, 4, 47009 Valladolid) que está asfaltada, entre árboles y bastante céntrica.
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