Una ruta alternativa con autocaravana
Ponemos rumbo a tierras burgalesas. Con nuestra camper recorreremos campos llenos de historia, de leyendas, de dinosaurios, de queso y morcillas. Una ruta alternativa alejados de catedrales y campeadores. Es la ruta por la Sierra de la Demanda, donde viajar con prisas casi está prohibido.
Podemos empezar por Santo Domingo de Silos. Un lugar de paz y tranquilidad. Visitamos su monasterio, con su claustro románico y, con un poco de suerte, se puede coincidir con alguna de los 7 rezos diarios en las que sus monjes cantan los cánticos gregorianos que tan famoso han hecho a este monasterio. No hay que olvidar que fueron número 1 en las listas de radiofórmula en los años 90.
En lo alto del monasterio, en su parking, es posible aparcar y pasar la noche en nuestra autocaravana. Fuera del complejo monástico, desde la plaza mayor del pueblo hay unas vistas magníficas del monasterio y además se puede disfrutar de uno de los mejores cabritos asados de la zona. La muralla, las casas tradicionales y las casonas nobles rematan el conjunto de un pueblo que vive a la sombra de su monasterio.
Muy cerca de Santo Domingo de Silos está el curioso cementerio de Sad Hill.
El duelo final de El bueno, el feo y el malo fue rodado en julio de 1966 aquí. Para rodarlo construyeron un camposanto de 5.000 tumbas para esta escena y, después de años de abandono, en 2018 un grupo de vecinos recuperaron este escenario, el cementerio de Sad Hill.
El escenario es en realidad el valle de Mirandilla, un espacio natural de los sabinares de Arlanza, el mayor sabinar del mundo. Una silueta de Eastwood con su característico poncho da la bienvenida a este cementerio. Un lugar muy especial.
De aquí cogemos la BU-910 con destino a Salas de los Infantes. La comarca de Sala de los Infantes atesora gran cantidad de fósiles, de hecho, aquí se hizo la primera excavación de Castilla y León donde se encontraron dinosaurios. Por este motivo aquí se aloja el Museo de los Dinosaurios con la colección más completa en géneros y especies de dinosaurios de toda España, y de las mejores de Europa. Los numerosos hallazgos de dinosaurios de esta zona, junto con restos de cocodrilos, tortugas y peces del Mesozoico han permitido reconstruir un ecosistema muy fiel de lo que fue la vida en el Mesozoico. Nos podemos sorprender lo que los niños saben de dinosaurios…
El Museo cuenta también con una sala de arqueología con piezas de los distintos grupos de humanos que durante la prehistoria vivieron en estas tierras. Un plan perfecto para niños y mayores.
Siguiendo la ruta hacia el norte nos encontramos con Monasterio de la Sierra. Un pequeño pueblo con tesoros como el Monasterio de Nuestra Señora de los Lirios de Alveinte que se levanta en medio de un bosque de robles y a orillas del río Arlanza. De aquí sale una de las rutas de senderismo por el paraje natural de El Castillejo, toda una recomendación para los amantes de la naturaleza. La ruta es circular y de unos 9 kilómetros. En tres horas se hace perfectamente. Las llamativas y extrañas rocas que encontramos por el camino se asemejan a una ciudad encantada.
Por la BU-825 llegamos a Barbadillo del Pez. El pueblo es famoso por las magníficas truchas que se pescaban en el río Pedroso, que divide la localidad en dos.
A 12 kilómetros de Barbadillo del Pez y siguiendo por la Sierra de la Demanda está Pineda de la Sierra. Un lugar muy especial y donde las autocaravanas son bien recibidas.
Cobijada por las cumbres de la montaña, casi siempre nevadas, el entorno de Pineda de la Sierra es un paraíso natural. Tiene frondosos bosques, valles verdes, lagunas de origen glaciar y curiosos yacimientos donde encontrar huellas de dinosaurios. En Pineda de la Sierra además está la mayor concentración de necrópolis y eremitorios de la alta Edad Media de toda Europa.
De aquí y recorriendo la BU-820 y la BU-813, tras 28 kilómetros contemplando el valle de la Sierra de la Demanda, encontramos Pradoluengo. Esta población sorprende. Su arquitectura indiana y señorial dice mucho de su poderío económico.
Pradoluego es un trozo de historia. La zona está habitada desde tiempos de los celtíberos y alcanzó su máximo esplendor en el siglo XIX gracias a su industria textil. Boinas y calcetines era su especialidad y hoy en día sigue siendo una fuente de riqueza, y de patrimonio, de este pueblo burgalés. El Mercado Municipal y la Plaza de Toros, son, a criterio de los entendidos, de los más bonitos de España.
Y terminamos la ruta en Belorado. Aquí podemos dejar nuestro vehículo en las cercanías de la Plaza Mayor y recorrer a pie la ciudad. A lo lejos se ve la silueta de las ruinas de lo que fue el Castillo de Belorado, uno de los puntos de vigilancia más importantes durante la Edad Media y que defendía el paso a la meseta desde el Valle del Ebro. Hoy es un referente para el Camino de Santiago.
Entre el pueblo y el castillo encontramos cuevas que sirvieron de eremitorios para San Caprasio, Santa Pía y San Valentín, que se escondieron aquí tras las persecuciones romanas.
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